Brad Pitt acudió a Alcohólicos Anónimos para superar sus adicciones tras su separación con Angelina Jolie

En declaraciones a la última edición de la revista GQ británica, Brad Pitt, de 58 años, insistió en que el desequilibrio emocional y la profunda tristeza son una parte inevitable del crecimiento humano

Brad Pitt ha hecho una evaluación de la condición humana mientras sigue adelante tras el colapso de su matrimonio de cinco años con la actriz Angelina Jolie.

La estrella de Hollywood ha abrazado una vida de abstinencia que comenzó poco después de que su divorcio finalizara en 2016, no obstante, su nueva faceta se ha visto atenuada por la creencia de que todos experimentamos un dolor desgarrador en algún momento de nuestras vidas.

En declaraciones a la última edición de la revista GQ británica, Pitt, de 58 años, insistió en que el desequilibrio emocional y la profunda tristeza son una parte inevitable del crecimiento humano.

“Creo que todos nuestros corazones están rotos. Siempre me he sentido muy solo en mi vida, solo cuando crecía de niño, solo incluso aquí y no ha sido hasta hace poco que he tenido un abrazo fuerte de mis amigos y mi familia“, dice la estrella de Hollywood.

A pesar de la sensación de aislamiento, Pitt admite que ha construido grandes lazos de amistad gracias a su decisión de dejar el alcohol en 2016.

Recién divorciado, el actor pasó 18 meses asistiendo a reuniones periódicas de Alcohólicos Anónimos mientras abrazaba los principios básicos del grupo de abstinencia de todas las sustancias que alteran la mente.

“Tenía un grupo de hombres realmente genial, privado y selectivo, por lo que era seguro. Porque había visto cosas de otras personas que habían sido grabadas mientras se desahogaban y eso es simplemente atroz para mí”, revela el actor.

Pitt, quien fue fumador de toda la vida, también tomó la decisión de dejar los cigarrillos y optó por sustituir el tabaco por chicles con sabor a nicotina.

La conciencia del actor respecto a sus propios defectos está muy lejos de su pasado, cuando admitía libremente que fumaba marihuana a diario, incluso durante su primer matrimonio con Jennifer Aniston.

“Pasé la mayor parte de los años 90 escondiéndome y fumando marihuana”, dijo al New York Times en 2019. “Me sentía demasiado incómodo con toda la atención”.